¿Qué es lo anti-humano?
Se infiere pues, que el concepto “anti-humano” reúne y califica todo aquello que va en contra, en este sentido, del razonamiento psicológico, el cuál a su vez se ve reflejado en el comportamiento y en las acciones concretas realizadas por cada individuo. Es decir, lo que no es propio de la naturaleza humana será lo anti-humano.
Partiendo del punto de la historicidad que compone al ser humano, esto lo pone en un mismo nivel que al animal, que a la bestia. Eh aquí la primera noción, o mejor dicho, la primer idea acerca de los conceptos que componen a la naturaleza de los seres humanos. El hombre inició su existencia solo, valiéndose por sí mismo, lo cual indica el desarrollo que éste tuvo de las virtudes individualistas que se expondrán a lo largo del texto. La finalidad de cualquier especie es sobrevivir, así que, aquí se presenta una dualidad irónica con respecto a la afirmación “el hombre es, por necesidad, un ser absolutamente social.”, es decir, necesita de otros seres, incluyendo a los de su misma especia, para poder subsistir. Esta necesidad de ser social se ve involucrada de manera inminente en la época prehistórica pues el humano es considerado como una especie “débil” y sin protección ante un entorno hostil, peligroso y por ende mortal, que fácilmente pone en riesgo su supervivencia. La salvación de este mismo se define a partir de que descubre su capacidad o virtud de ser un ser racional, capaz de juicio, crear metodologías y técnicas de supervivencia, pero, esta misma virtud se supo aplicar en el campo de lo humano; para favorecer la naturaleza humana logrando un enriquecimiento individual y egocéntrico. Es aquí donde adquieren validez los términos antes usados “dualidad irónica”, pues el ser A necesita del B y viceversa, para lograr ese mantenimiento frágil de la vida, pero sin tener la conciencia o noción de que puede, y en realidad, que la mera finalidad de ésta es el aprovechamiento por conveniencia que desemboca en un crecimiento individualista; la aparición del concepto de moralidad.
Así pues, se exponen de manera concreta los componentes básicos de la naturaleza humana, los verdaderos principios que rigen el inicio de la eterna lucha entre el mundo de los instintos contra las cadenas opresoras de la moral y ese pavor que se tiene al saberse como un ser antiético.